BELLEZA ÉPICA

El Chaltén es mucho más que trekking: lagos, andinismo, glaciares, paisajes maravillosos, ríos, literatura, historias épicas de pioneros y, obviamente, la pesca.

El título de “Capital Nacional del Trekking” se queda corto… sería más adecuado nombrarla como la “Capital Mundial” y quizás tampoco le haría justicia. Y no es sólo cuestión de la calidad y cantidad de posibilidades que ofrece a los senderistas, sino también de su fama mundial.

En sus calles se escuchan tantos idiomas que bien podríamos llamarla también como la Nueva Babel. Japoneses, austríacos, alemanes, húngaros, polacos, suizos, franceses, italianos… gente venida de países con larguísima tradición en ese raro deporte de vagabundear por senderos maravillosos, lo más granado del trekking mundial pone a esta localidad como una de sus prioridades. Y se escuchan tantas tonalidades del español que cualquiera podría pensar que allí está condensada toda Latinoamérica, como el Aleph del genial Jorge Luis Borges.

Pero dejemos de lado lo que ya todo el mundo conoce de El Chaltén, para ir a otras cosas interesantes para los que vagabundeamos por la Patagonia con la familia.

PIONNERS

Andreas Madsen fue un marinero danés, que muy joven recaló en Buenos Aires y pronto consiguió trabajo en la Comisión de Límites junto al inmortal Francisco Pascasio Moreno. Participó en la remontada del río Santa Cruz y el descubrimiento del lago Argentino, también en la posterior exploración de los lagos Viedma y San Martín, incluso en la colocación de muchos hitos limítrofes.

Y una vez finalizado el trabajo de la Comisión fue encargado por el gobierno nacional para colaborar en el asentamiento de una colonia de finlandeses en Misiones, pero el clima cálido no era de su gusto. Volvió a la Patagonia austral y se asentó en el lago Viedma haciendo mil trabajos para empresas madereras y estancias lanares, hasta que encontró su lugar en el mundo en la margen norte, donde levantó la primera casa de la zona y dio riendas sueltas a sus sueños de ser propietario y colono.

Pero se trataba de una época donde los poderosos imponían sus propias leyes, y los grandes capitales latifundistas lo obligaron a trasladarse a un valle andino por donde corre el río De Las Vueltas, a los pies del monumental cerro Chaltén (antiguamente llamado Fitz Roy).

Volvió a Dinamarca para buscar a su “Penélope” que lo esperaba para casarse, y regresó a la Patagonia amada, donde rindió tributo patriótico al país que lo acogió y cumplió sus sueños de ser propietario. Él y su esposa Fanny no sólo fueron pioneros, sino un verdadero mojón donde podían ondear los dos pabellones: el rojo y blanco danés, y el celeste y blanco argentino.

Tuvieron 4 hijos en aquellas soledades, uno de los cuales fue el primer guardaparque del PN Los Glaciares. Fueron encargados de una estación del Servicio Meteorológico Nacional y criadores de ovejas. Hoy se nos hace imposible imaginar cómo era la vida en aquellos tiempos donde el almacén más cercano distaba a 400 km, casi un mes de marcha en carreta.

Este marinero devenido en domador y ovejero, en su vejez se convirtió en escritor por azar del destino, generando dos libros de valor incalculable para la literatura patagónica: La Patagonia Vieja (que llegó a ser recomendado como texto escolar) y Cazando Pumas en la Patagonia, crónicas que hacen temblar al más pintado. Un tercer texto vio la luz luego de su muerte: Relatos Nuevos de la Patagonia Vieja que recopila artículos escritos para revistas de la época y cartas personales. Más allá de la técnica literaria, son todos relatos que nos llevan a tiempos tan lejanos como salvajes… créame amigo lector, se trata de algo que eriza la piel y no tiene nada que envidiarle a cualquier famoso título la literatura de aventuras.

Soy un declarado admirador de Andreas Madsen, lector de sus libros mucho antes de conocer El Chaltén, por lo que al enterarme que su casa estaba en pie y abierta al público no pude evitar querer conocerla. Y gracias a Tomás Aquino y Zoe Taylor de Wolk Patagonia pude visitarla. Allí corroboré que distaba mucho de ser un opulento casco de estancia, y me encontré con la morada digna y humilde de una pareja de rudos pioneros.

Quizás ni los propios habitantes de El Chaltén saben del valor histórico de esa casucha, y mucho menos los turistas. Si usted planea visitar esa localidad, primero lea alguno de esos libros (que podrá encontrar en internet), y la lectura será una preparación que lo hará desear viajar urgente. Y al llegar, verá que todo leído es absolutamente verdadero.

Cuando vaya a esos pagos, no deje de visitar esa casa… mucho menos de leer esos libros que lo harán soñar y transportarse a épicos momentos de la colonización de la Patagonia austral. Leyéndolos sabrá de los esfuerzos que significó ejercer la soberanía en esas tierras.

LAGO DEL DESIERTO

A sólo 30 km de El Chaltén se ubica el lago del Desierto, un pequeño espejo que inunda un largo valle entre dos cadenas de montañas. Este hermosísimo espejo se hizo famoso por una disputa limítrofe entre la Argentina y Chile, que fue resuelta en 1994 por el fallo de un tribunal arbitral que sentenció en favor de nuestro país, y se convalidó el año siguiente cuando el mismo tribunal rechazó el pedido de reconsideración por parte del país trasandino.

Al lago se llega por la RP23 que va costeando el río De Las Vueltas, un verdadero lujo de paisajes y atractivos interesantísimos como saltos, lagunas, glaciares y hasta sitios que recuerdan enfrentamientos entre gendarmes argentinos y carabineros chilenos.

Si se trata de una salida familiar, lo paisajístico se puede ampliar con caminatas por senderos de baja dificultad y recorridos por las costas del lago. También se pueden hacer paseos lacustres en lanchas o catamaranes. Muy cerca de la boca del río se halla la estancia Lago del Desierto frente al puente colgante que ofrece servicios de parrilleros, buffet, camping, merenderos, baños y kiosco.

Si se trata de padres amantes del senderismo con hijos adolescentes, hay oportunidad de varios recorridos de baja y mediana dificultad, incluso un recorrido costeando el lago hasta el puesto de gendarmería donde se puede pasar a Chile.

Y si es una familia amante de la pesca, es un sitio ideal para aprender a pescar truchas. El lago ofrece costas muy fáciles de acceder, donde es sencillo y cómodo pescar, sin ningún peligro para adolescentes. Pudimos comprobar la buena población de truchas arco iris hasta un kilo que los principiantes podrán tentar con spinning, mosca o buldos.

Y para quienes estén aprendiendo con el fly, los primeros tramos del río De Las Vueltas son muy simples de encarar y está poblado de miles de truchitas glotonas y ansiosas por atacar cualquier mosca. Quién busca asegurarse una jornada de aprendizaje con secas y ninfas, será una oportunidad maravillosa, ideal para un padre que desea acompañar el comienzo de un hijo o una hija en la modalidad.

Quienes dan sus primeros pasos en el fly necesitan muchos piques, sin importar el tamaño de los peces, que les permitan ejercitar tanto los lanzamientos como las técnicas básicas de pesca, también el dominio de la línea, la clavada, las técnicas de vadeo seguro, etc. Y, una salida al lago Del Desierto y el río De Las Vueltas, ofrece eso y mucho más.

PARA PESCADORES DE PALADAR NEGRO

El Chaltén es centro de una interesante zona de pesca para todos los gustos y todos los niveles de dificultad.

Como se dijo más arriba, abundan los sitios ideales para quienes dan sus primeros pasos y necesitan lugares fáciles de pescar con muchas truchas accesibles. También hay lagunas escondidas con muy buenos peces y algunos otros secretitos que, de la mano de un buen guía local, son cosas que valen la pena vivir.

Pero para los pescadores más avezados que buscan mayor dificultad y emociones fuertes, El Chaltén ofrece monstruosos salmones del Pacífico, que no son cosa sencilla, hay que decirlo. Pero con los servicios y asesoramiento de Tomás Aquino se ponen al alcance de la mano.

Ante todo, se necesita manejar buena información para planificar el viaje, y de allí la importancia de tener a mano un buen guía profesional de pesca local. Los salmones son migratorios, por lo que no se puede ir a pescar en cualquier momento. Y aún en la época adecuada se debe saber positivamente si los cardúmenes ya ingresaron al río o están listos para ingresar. También es fundamental saber el nivel del agua y el estado general del río, ya que son otros aspectos concluyentes que debe conocerse muy bien. Como ya dijimos, un buen guía es determinante.

Otra cuestión es conocer muy bien el río, no sólo para saber dónde están los salmones sino también para elegir el lugar más adecuado para poder sacarlos. Se debe saber que se trata de animales enormes en un río con muchos accidentes que conspiran contra el cobro luego del pique.

Por todo lo expuesto, no recomendamos planificar un viaje de pesca en pos de los salmones sin la asistencia de un buen guía local como Tomás Aquino. Esos peces son muy exigentes y representan un trofeo de nivel internacional, lo que no admite ninguna improvisación.

Pero cuidado: es importante tomar conciencia y cuidar tanto al río como a sus peces y, muy especialmente, en su zona superior. Desgraciadamente, no faltan quienes capturan salmones para su consumo o la venta, llevándose valiosísimos peces que vivos generarán muchos puestos de trabajo para el producto turístico de la pesca. Una verdadera pena que exige más visión de quienes deben velar por ese recurso.

Esos salmones del Pacífico tienen un valor turístico y deportivo enorme, lo que dota a este destino de un atractivo más, muy importante para el mundo de la pesca deportiva nacional e internacional. Quienes toman las decisiones deben preservar al río y a sus peces para no matar a “la gallina de los huevos de oro”.

PARA TERMINAR

Como es obvio, no es necesario presentar las bondades de El Chaltén, ya que el nombre lo dice todo. Aquí sólo quisimos resaltar dos o tres aspectos que creemos valen la pena más allá del trekking, y que justifican alargar la estadía para disfrutarlos.

Y una vez más, no deje de leer a Don Andreas Madsen, el visionario que fue el primero en enamorarse de esos hermosos pagos.