Fantástico lugar ubicado en las márgenes del río Uruguay, allí se encuentra la represa Concordia-Salto Grande y, precisamente, contra la pared y en zonas cercanas a ésta es donde se realiza una pesca increíble, de los dorados más grandes del mundo.
Por Eduardo Gambini
Junto a Hernán Fiorentini, operador de pesca, Joel Ansaldi y, su papá, Ariel, arribamos a “La Zona” lodge, un excelente hotel donde nos alojamos la tarde anterior para realizar nuestras salidas de pesca en dos turnos, el primero de 6 a 8 hs. de la mañana, y el segundo turno de 12 a 15 hs. Ya instalados comenzamos a preparar nuestros equipos para la gran batalla.
EQUIPOS
Se recomiendan equipos potentes para esta pesca, ya que los ejemplares que se logran son de unos tamaños muy importantes, cañas tipo embarque de un tramo de 20 a 30 lbs de resistencia, reeles rotativos en tamaños 300 o 400 cargados con multifilamento de 60 lbs por lo menos, es decir, de unos 30 mm, anzuelos de muy buena calidad 9/0 o 10/0 y leaders de acero de 60 a 80 lbs.
También utilizamos reeles frontales en tamaños 4000 ya que hubo momentos en que debíamos realizar largos lances para caer con nuestros señuelos en sitios específicos y, a veces, con los rotativos no se logran esas distancias.
Recomendable es llevar por lo menos dos equipos por pescador, porque en nuestro caso hubo dos reeles rotativos “detonados”, no resistieron los frenos.
En esta oportunidad pescamos con carnada natural el primer turno, obteniendo más de 27 dorados en dos horas de pesca, los tamaños rondaron entre los 7 a 10 kilos, que según nuestro guía Alejandro eran dorados chicos. Imaginen nuestra cara de asombro cuando nos dijo eso, y nos aseguró que a la tarde obtendríamos ejemplares de 12, 15 a 20 kilos.
El primer turno llenó nuestras expectativas, pero aún faltaba la segunda salida de 12 a 15 hs.
SEGUNDO TURNO
Este segundo turno realmente fue cosa de locos. En este caso salimos con el guía Elbio “Bebote”. Comenzamos con carnada natural y, luego, en mi caso, coloqué un artificial que se utiliza en este lugar y se lo conoce como “plumerillo” es una especie de fioco con plomo pasante de unos 90 grs. Para que logre bajar rápidamente, ya que en estos sectores las profundidades rondan los 15 a 20 metros. Realmente funcionó de maravillas, obteniendo muchos ejemplares de tremendos tamaños.
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