El origen del mate data del siglo 16, cuando en América del Sur los indios guaraníes llevaban unas pequeñas bolsas de cuero – llamadas “guayacas” – en donde guardaban hojas de yerba mate triturada y tostada que masticaban.
Origen de la yerba mate
El origen de la yerba mate se remonta a los nativos guaraníes, ellos utilizaban sus hojas como bebida, objeto de culto y moneda de cambio con otros pueblos.
Durante las largas travesías por las selva, los conquistadores notaron que los guaraníes tenían mayor resistencia luego de tomar esta bebida sagrada.
Un regalo de los Dioses
Caá en lengua guaraní significa yerba, pero también significa planta y selva. Para el guaraní, el árbol de la yerba mate es el árbol por excelencia, un regalo de los Dioses.
Los conquistadores aprendieron de los guaraníes el uso y las virtudes de la yerba mate, e hicieron que su consumo se difundiera, desde su zona de origen a todo el Virreinato del Río de la Plata.
Los nativos guaraníes fueron quizás los primeros en tomar mate. Los españoles notaron que llevaban con sus armas, una pequeña bolsa de cuero con hojas trituradas y tostadas.
Mascaban estas hojas de yerba mate, o las ponían en una calabaza y tomaban la infusión usando los dientes como filtro o una caña ahuecada, que hoy conocemos como bombilla.
Los Jesuitas y las reducciones
Más tarde los Jesuitas introdujeron el cultivo en las reducciones.
Fueron los grandes responsables de que la yerba mate fuera conocida en el mundo civilizado.
La costumbre del mate ha permanecido inalterada desde tiempos remotos y por cinco siglos de historia, arraigándose y extendiéndose a lugares lejanos.
Fuente: La Aventura de la Yerba Mate, Más de cuatro siglos de Historia, Jerónimo Lagier, Editorial Tambú. Cap. 1: La Conquista y los Jesuitas.