¿No les pasa que cuando hacen las cosas como se deben, uno se siente realmente bien?… Bueno, ¿Qué mejor si eso implica haber estado CAZANDO?
Texto: Néstor Baldacci – nestor.baldacci@hotmail.com
Esta va a ser una nota corta, no se preocupen, no los voy a aburrir… pero quiero contar algunas experiencias vividas durante la pasada temporada de caza de patos 2022, que en la provincia de Santa Fe se extendió desde el 1º de mayo y hasta el 31 de julio inclusive, permitiendo cazar un máximo de 12 patos por cazador por excursión, en la sumatoria total de las tres especies permitidas (crestón o picazo, sirirí común y sirirí pampa) con un máximo de 6 de cada especie.
Por otra parte, orgullosamente puedo decir que mi provincia, Santa Fe, exige que la caza de patos solamente pueda realizarse utilizando cartuchos con municiones que no sean de plomo, como por ejemplo las de acero, tungsteno o bismuto. ¿Y por qué orgullo? Bueno, es una larga historia, que comienza allá por el 2007, cuando tomé contacto con un grupo de científicos contratados por la provincia, para que realizaran un estudio sobre la, hasta entonces, presunta contaminación por plomo ocasionado por la dispersión de las municiones en ambientes acuáticos.
Hoy esos estudios tienen asidero científico y, tal como lo hacen los países más desarrollados del mundo, se opta por modificar el tipo de munición de los cartuchos cuando se realiza caza en humedales o en puestos fijos como el tiro a la paloma, donde la concentración de las municiones dispersadas, es muchísimo mayor que en el resto de las actividades de caza.
No quiero caer en repeticiones, esta temática ha sido objeto de muchísimas notas y también me ha generado no pocos enojos o enemistades con cazadores que piensan diferente. Generalmente todo cambio a la gente le genera un rechazo automático y en el argentino tipo, además un afán por buscar excusas o refutaciones para sostener su postura, somos así, es inevitable, pero bueno, tampoco pierdo la esperanza de que iniciemos el cambio, que nos transformemos poco a poco en cazadores más responsables.
Si países como Estados Unidos, Suecia, Noruega, ó Canadá admiten que el uso de plomo en las municiones contamina el ambiente y prohíben su uso en la caza de acuáticas, desde hace más de 40 años, y si existen hoy en el mercado, cartuchos que tienen municiones alternativas y que definitivamente NO DAÑAN los cañones de nuestras escopetas, por lo que podemos utilizarlos sin siquiera notar la diferencia, sugiero que dejemos de buscar excusas y actuemos de manera responsable.
Yo esta temporada utilicé los cartuchos de la marca RD con munición de acero, que vienen en calibre 20 y 12 (ojalá incorporen el 16 también), está bien, usé una escopeta Boito, rústica, pero mi hijo cazó con su Rizzini y, a lo largo de la temporada, fuimos compartiendo cacerías con otros tiradores con diferentes armas y en todos los casos, todas las escopetas volvieron completas, sin daños visibles ni externos, ni internos, ni algún mecanismo desajustado o roto.
Los patos, cuando se les apuntó correctamente, cayeron exactamente igual que cuando, años atrás, utilizábamos perdigones de plomo, y en comparación, se nos fueron igual cantidad de patos heridos que antes, solo que, es bastante probable que si no se les tocó un órgano vital, sobrevivan a las heridas ya que el acero a diferencia del plomo, mayormente y, salvo excepciones, perfora y no queda alojado en el cuerpo, disminuyendo el riesgo de infección o contaminación por plomo en sangre del animal. Ojalá se animen muchachos, prueben que “no los voy a defraudar”… pero de verdad, además que, por los menos en Santa Fe, si utilizan la munición de plomo, están violando la normativa vigente, un dato no menor. Ojalá quienes no viven o cazan en Santa Fe, también se animen y las provincias imiten el ejemplo.
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